El 31/10/2019 nos incorporamos al curso escolar de catas del Grupo Ribeira de Fefiñans (Cambados), tras el parón del verano y nuestras vacaciones en la Costa Oeste de USA. Esta vez nos encargamos Pelayo y yo de los vinos, aportando seis botellas que habíamos traído de nuestro viaje en Mayo por Rumanía. Prácticamente todos los vinos que probamos durante nuestra estancia de diez días en este maravilloso país nos habían encantado así que trajimos las siguientes referencias:
1.Cuvée de Purcari Fetească Albă Brut: vino espumoso blanc de blanc, elaborado por el método tradicional (1ª fermentación, para pasar en botella la segunda y una posterior maduración) con Fetească Albă por la Bodega Purcari de Moldavia. Sorprendió por su finura, acidez y buena elaboración. Quiero añadir que todas las referencias que hemos probamos hasta la fecha de esta bodega nos han gustado mucho.
Al parecer, la variedad Fetească Albă es ampliamente utilizada en Europa del Este, principalmente en Rumania, pero también en Moldavia, Hungría, Bulgaria y Ucrania. Fetească significa DONCELLA en rumano y podemos diferenciar tres variedades distintas:
-Fetească Regală (doncella real)
-Fetească Neagră (doncella negra)
-Fetească Albă (doncella blanca)
Fetească Albă parece ser la forma primordial de Fetească, por lo que se cree que las otras dos evolucionaron de ésta. A pesar de esto, Fetească Regală es la más plantada de las dos, ya que sus vinos presentan más complejidad. Por su parte, Fetească Albă produce vinos secos y aromáticos con frutas de hueso y sabores tropicales, pero también se utiliza en la producción de vinos dulces y espumosos.
Los niveles de azúcar de Fetească Albă son naturalmente altos, por lo que la hacen adecuada para la producción de vino dulce. En Rumanía la variedad funciona bien en la zona de clima continental fresco de Transilvania, donde se planta más ampliamente. Encontré algunos sinónimos de la variedad como Fetiaska, Feteaska, Madchentraube.
2.Tămâioasa românească 2017: vino blanco elaborado con dicha variedad por Domeniul Coroanei Segarcea, dentro de la DOC Segarcea. Tras la vendimia a mano, se despalilla y se deja macerar con la piel durante 24 horas a 8-10ºC. Se deja fermentar durante unos 30 días y se mantiene en depósitos de inox a temperatura controlada durante 3-5 meses, con bâtonnage. Este vino fue mejorando desde que fue abierto, aún así fue quizás el que menos me gustó de los seis.
Segarcea, que significa LA TIERRA DEL SUEÑO, y fue uno de los doce dominios que el Rey Carol I de Rumanía tomó bajo su administración, por decisión del Parlamento, en 1884. El objetivo era que cada dominio se convirtiera en un centro agrícola de vanguardia y, concretamente a Segarcea, se le asignó el cultivo del viñedo. Desde entonces los vinos de esta zona han estado muy ligados a los reyes, gobiernos, diplomáticos, etc., siendo testigos de la historia del país.
En Segarcea se produjeron 60 variedades en 300 hectáreas de terreno. La construcción de la bodega terminó en 1908, siendo uno de los primeros edificios de hormigón armado de acero en Rumanía. En 1929 se reconoció la DOC Segarcea, y sus vinos eran ya muy apreciados. La finca se encuentra a 70 km del Danubio y, en el pasado lejano, estas colinas se encontraban bajo el mar.
En cuanto a Tămâioasa românească, se trata de una variedad antigua de uva rumana (se cultiva desde hace más de 2000 años), que al parecer tiene su origen en el sur de la antigua Grecia. Antiguamente se utilizó como moneda de cambio en el Mediterráneo y en la actualidad cultiva en varias DOC como Dealu Mare, Cotnari, Segarcea, etc. A menudo acumula 240-250 g/l de azúcar, e incluso 270-300 en años favorables. La bodega Domeniul Coroanei Segarcea posee 16Ha de esta variedad, con una densidad de 6000 plantas por Ha.
3.Vinohora 2017: este vino pertenece a una colección limitada de vinos que mezclan variedades autóctonas de Moldavia con otras internacionales, elaborado por Purcari. En este caso contiene 51% de Fetească Neagră y 49% de uvas de Montepulciano.
Según relatan en su web, a finales del siglo XII, la industria vitivinícola de Moldavia se había convertido en un sector importante de la economía del sudeste de Europa. El pueblo de Purcari y los viñedos del monasterio de Agon Zograf se encuentran en una zona particularmente fértil, ideal para el cultivo de uvas con cuerpo. Al existir similitudes con el suelo y clima de Burdeos, los colonos franceses se asociaron con el monasterio de Agon Zograf y comenzaron a cultivar cosechas especiales de Purcari en el siglo XVIII.
Consiguieron niveles comparables de intensidad y complejidad por lo que los vinos de Purcari comenzaron a competir en ferias y exposiciones internacionales, dejando impresionados a los expertos y consiguiendo varias medallas de oro. Durante mucho tiempo, los vinos de Purcari fueron tan populares como los vinos de Burdeos o Borgoña. El vino fue servido al emperador Nicolás II, el rey Jorge V y la reina Victoria de Gran Bretaña. Así mismo vendidos en Dinamarca, Países Bajos, Suecia, Alemania y Francia.
Hasta después de la guerra, sobre 1950, no comenzó una nueva era en la historia de Purcari. La bodega se encuentra en un castillo entre el río Dniester y el Mar Negro, donde se replantaron a principios de siglo 250 hectáreas de viñedos y se instaló tecnología punta. Hoy en día vende vino a 25 países diferentes (EE. UU., Canadá, Reino Unido, Noruega, República Checa, China, Polonia, países bálticos, etc). El castillo de Purcari se puede visitar, ofrece cocina europea, paseo en barco y pesca en los lagos cercanos, etc. Dispone de 10 habitaciones de lujo y dos restaurantes, así como visitas guiadas.
4.Negru de Purcari 2016: vino tinto elaborado con 70% Cabernet Sauvignon, 25% Saperavi y 5% Rara Neagră. Vino noble, con estructura, intensidad y complejidad, pasa 18 meses de crianza en barricas de roble francés.
La variedad tinta Rara Neagră se cultiva principalmente en Rumanía, pero también en Moldavia y Ucrania. También se conoce como Băbească neagră, lo que significa ABUELA DE LA NEGRA. Los vinos que produce suelen presentar fruta y cuerpo ligero. Al ser una variedad antigua ha dado lugar, con el paso del tiempo, a mutaciones y otras variaciones. Es una uva de maduración tardía, lo que ayuda a la resistencia del invierno y a las heladas de hasta -18ºC. Sin embargo, al conformar racimos muy sueltos, con uvas medianas de piel fina, es muy susceptible a la botrytis y la sequía.
5.Saperavi 2016: vino tinto elaborado por Gitana Winery con Saperavi en Moldavia. Cosechan de uvas a mano y fermentación durante 20 días en fudres de roble con levaduras indígenas. Tras la fermentación maloláctica, se decanta y envejece en depósitos de inox hasta el embotellado. Fue uno de los dos vinos con más éxito de la noche, junto con el siguiente.
En 1999, los esposos Dulghers compraron la fábrica de vino «Tiganca», en el pueblo de Plopi. A pesar de que estaba en un estado deplorable, tras la mala gestión durante el período soviético, disponía de túneles subterráneos con temperaturas constantes, ideales para la crianza del vino. El objetivo de los Dulghers es producir vinos de calidad, optando por adquirir barriles de madera para elaborar sus vinos. Ambos disponen de formación en Viticultura y Enología, enamorados del terruño, apasionados por el vino. Buscan vinos complejos y elegantes, que expresen las particularidades de la zona de origen. Al parecer, esta zon, Valul Lui Traian, posee condiciones climáticas similares a las de Burdeos y el Piamonte.
Disponen de 360 Ha de viñas en laderas con orientación suoeste, suelos fértiles, influenciados por el Mar Negro. Tratan de que cada variedad conserve su tipicidad, con una mínima intervención humana, combinando tradición con tecnología. Las condiciones climáticas de la zona son excepcionales, pues no hay heladas, buena exposición y poca humedad.
La variedad Saperavi es de piel oscura, originaria de la República de Georgia (de hecho significa TINTE en georgiano). Se cultiva ampliamente en todo el Cáucaso hasta las regiones de la antigua República Soviética. Aporta color intenso y marcada acidez a los vinos. En las últimas décadas, también ha demostrado ser capaz de producir vinos varietales de alta calidad (a menudo criados en barrica). De maduración tardía, prospera en los climas más fríos del este de Europa continental, donde produce rendimientos generosos sin comprometer la calidad demasiado. Es una variedad que ya habíamos probado en una cata anterior, sobre vinos de Georgia, que organizó Santiago.
6.Eclipse Fetească Neagră 2015: vino tinto elaborado con dicha variedad por Crama Basilescu en la zona de Prahova de Rumanía. Tardó en abrir pero resultó estar estupendo. Se valieron para ello de uvas del viñedo de Dealu Mare que se conoce como “Wine’s Stone”, de gran tradición, como demostraron las excavaciones arqueológicas (y de hecho nos encantaron todos los vinos que probamos de esta zona). De hecho los primeros documentos que hacen alusión al cultivo de la vid se remontan a los siglos XIV y XV.
Nicolae Basilescu fue el origen de esta bodega, nacido en Urlaţi en 1860 se distinguió por su inteligencia y ambición, que lo ayudaron a superar sus límites sociales. Se hizo conocido como una personalidad ilustre de la sociedad rumana del siglo XIX, llegando a ser decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de Bucarest.
Nicolae y su hijo Aristide se asociaron con el restaurante Capşa y la Maison de Champagne St. Marceaux & Co (cuyos cimientos se establecieron en Reims en 1837). Entre 1910-1921, Nicolae restaura la fábrica de cerveza de Bucureştii Noi y la convierte en una fábrica de champán natural. Esta historia de éxito termina abruptamente en 1949, cuando el estado secuestra todos los bienes y terrenos que pertenecían a la familia Basilescu. Sus miembros son reubicados en Mizil, donde fueron obligados a vivir hasta 1964.
No es hasta 2003 cuando se recuperan parte de los viñedos de Nicolae, incluida la casa señorial de Urlati. Se recuperaron variedades rumanas, dando gran importancia al terroir, la posición de las parcelas, el clima, etc. Actualmenteoseen 60 hectáreas de viñedo en Urlati, DOC Dealu Mare, donde cultivan variedades como Feteasca Neagra, Cabernet Sauvignon, Merlot, Burgund Mare, Pinot Noir, Sauvignon Blanc, Chardonnay, etc.
En cuanto a la variedad Fetească Neagră, típica de Moldavia y Rumanía, muestra buena estructura tánica, con aromas a especias y fruta ahumada. Durante la época soviética prácticamente desapareció de Moldavia, mientras continuó su cultivo en Rumanía. Es apreciada por su resistencia al frío y la sequía. Madura tarde y posee pieles gruesas, lo que origina gran concentración de antocianinas. Conocida por su profundo color rojo rubí y aromas a mora, cereza, ciruela y chocolate. Tras estudios de ADN, se han identificado al menos cuatro tipos diferentes de Feteasca Neagra; dichas mutaciones demuestran que la variedad es relativamente antigua. Algunos sinónimos que encontré son: Coada Randunicii, Feteaska, Fetyaska, Pasareasca.
La cena consistió en los siguientes platos y unas riquísimas Cañitas de hojaldre rellenas de crema que me olvidé de fotografiar:
-Jamón
-Chocos en su tinta
Los vinos que acompañaron la cena fueron los siguientes:
–Alvaro Castro 2016: vino tinto elaborado con Touriga Nacional, Tinta Roriz y Jaen por la bodega Quinta da Pellada (Portugal), perteneciente a la DOC Dao.
-Rocha Candeal 2017: vino tinto elaborado con Garnacha de viñas de 30-40 años por Casa Lo Alto, con crianza en hormigón y fudre, DOP Valencia.
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