Diario de Levante: Valencia, Benidorm y Murcia

PREPARATIVOS DEL VIAJE

Aprovechando que se celebró por primera vez el Campeonato de España de Beach Tenis por Comunidades Autónomas en Benidorm, del 25 al 27 de Junio de 2021, nos quedamos unos días por Levante. Decidimos visitar Murcia tras el torneo, pues era la única Comunidad que no conocíamos todavía ninguno de los dos, y antes pasar por Valencia para ver a nuestros amigos Antonio y Nelly.  Aquí dejo enlaces a las noticias del campeonato:

-Noticias de la Federación Española de Tenis: inicio y fin del campeonato

-Prensa local anunciando el campeonato en Benidorm

-Prensa deportiva

-Convocatoria de los jugadores por parte de la Federación Gallega de Tenis y crónica del campeonato

El desplazamiento desde Galicia hasta Levante fue en avión de la compañía Ryanair, pues ofrece vuelo directo de Santiago hasta Alicante (211.92€ los dos billetes con derecho a dos maletas cada una: una de mano y otra de cabina):

-Ida 22/06/2021 a las 12:10

-Vuelta 01/07/2021 a las 15:15

Sin más dilación paso a relatar nuestro periplo por Levante.

MARTES 22 DE JUNIO 2021

Dejamos el coche aparcado en el parking de AENA del propio aeropuerto (54€), pasamos el control y al rato embarcamos, aterrizando en Alicante más o menos a la hora prevista. No llevábamos ningún coche de alquiler reservado porque a Pelayo, que es el que hace siempre esta gestión, no le convencía ninguna oferta de las que vio por Internet. Por lo tanto, en cuanto bajamos del avión, nos dirigimos a las zona de oficinas del alquiler y nos dirigimos a la que no tenía: SIXT. En Abril habíamos estado en Gran Canaria y el alquiler de coche nos había salido genial pero estas ofertas no se encuentran en la península.

Finalmente pagamos por 11 días de alquiler a todo riesgo 417€, entregándonos un Opel Mokka. Cuando entregamos el coche no tuvimos ningún problema pero al mes siguiente me cargaron en la tarjeta de crédito (requisito imprescindible para poder alquilar) 461’31€. Me puse en contacto con ellos y me dijeron que es que al coche le faltaban unos litros para tener el depósito lleno. Yo les respondí enviándoles el cargo en mi cuenta del depósito lleno en la gasolinera que hay al lado del aeropuerto y me dijeron que me lo devolverían pero aún estoy esperando…

Quedamos para comer con mi amigo Fajardo en Alicante, en un local que escogió él llamado Probar y que la verdad nos gustó mucho (además de que se encuentra en una bonita plaza rodeado por una Iglesia y bonitas casas pintadas de colores). Pedimos un menú degustación de tapas sorpresa para cada uno:

-Ensaladilla de anguila ahumada con picos

-Croquetas de jamón ibérico del «Big Manu»

-Coca amb tonyna pero bonita

-Tortilla con jamón

-Bocata de calamares con truco

-Plato de carne con patatas, pero no recuerdo qué era exactamente

Los platos fueron saliendo de la cocina, sin escoger nosotros nada, y tengo que decir que nos encantaron. El menú, de 20€, incluía pan y dos bebidas por persona, precio que me pareció más que correcto, visto el trabajo y originalidad de los platos, además de un servicio muy amable. Pedimos a mayores tres cafés, pagando por todo 65’90€.

Tras la comida nos despedimos de Fajardo y pusimos rumbo a Valencia, pues nos quedamos dos noches en casa de nuestros amigos Antonio y Nelly. Por cierto, nos recomendaron un local que está en el puerto de Alicante y que se llama Restaurante Santi, ideal para comer boquerones fritos y arroz con costra, que queda pendiente para otra ocasión. Una vez que llegamos a Valencia estuvimos de charleta con nuestros amigos un buen rato, pues hacía bastante tiempo que no nos veíamos y, cuando anocheció, nos dirigimos al restaurante que habían reservado: Ca Consuelo. Esto fue lo que pedimos para cuatro adultos y dos niños:

-Croquetas

-Gambas al ajillo

-Esgarrat de pimientos con mojama

-Calamar a la plancha

-Clóchinas

-Solomillo

Para beber pedimos un vino de Pago llamado Mestizaje 2018, elaborado con Bobal, Syrah y Garnacha en Utiel. No sé cuánto salió todo, pues nos invitaron, pero he de decir que la comida estaba buena y nos atendieron muy amablemente. Tras la cena se puso a llover así que rápidamente cogimos los coches y volvimos al chalet de nuestros amigos, donde nos tomamos una copa antes de ir para la cama.