Vinoteca Jaleo. La Coruña

El día 23/11/2019 acudimos con Flavio y Alessandra, nuestros queridos amigos brasileños, a la Vinoteca Jaleo, en La Coruña. Teníamos ganas de llevarlos, pues es uno de nuestros locales favoritos de la ciudad, que abrió sus puertas en la céntrica Calle de la Galera allá por 2013.

La jefa de los fogones es Ángeles Marzoa, una mujer de carácter, detallista, con ideas claras, que quiere que sus clientes coman bien. Su socio, Marco Antonio Tirado, dirige la sala y se encarga de la cava de vinos, una de las más interesantes y extensas de la ciudad, junto con Juan Pérez, sumiller. Ángeles y Marco provienen de La Estación de Cambre, un antiguo restaurante con Estrella Michelín que cerró las puertas hace años, y decidieron montar un local juntos, a su gusto. Puedo asegurar que Jaleo es uno de esos lugares mágicos en donde los platos y el vino se encuentran en un equilibrio perfecto. Paso a relataros los deliciosos platos que probamos esa noche:

-Empanada, cortesía de la casa

-Anchoas Sanfilippo

-Ensaladilla con huevos de codorniz

-Croquetas

-Guiso de boletus

-Salmonetes sobre faba de Lourenzá

-Tarta de limón (obligatoria) y Cañitas rellenas

Para beber dejamos a Juan, el sumiller, que fuese sacando copas o botella entera de lo que él quisiese, según la sed que tuviésemos:

-Albamar O Esteiro-Espadeiro 2017

-Xisto ilimitado 2018

-Quinta da Muradella crianza oxidativa 2009

-Manzanilla velo flor de Bodegas Alonso

-Kerpen Riesling-Spatlese 2001

Disfrutamos de la noche como enanos, pues Juan nos fue sacando las botellas a ciegas mientras degustábamos las estupendas preparaciones que salían de cocina. Tras el servicio pudimos disfrutar de la arrolladora simpatía de Ángeles, con la que siempre nos gusta charlar un rato. Os animo además a fijaros en el local, reformado al gusto de los dos socios, donde todo encaja a la perfección, a pesar de que el espacio no sobra: terracita exterior, entrada para tomar algo, cava de vinos, comedor al fondo y finamente la cocina vista.

En Jaleo podréis tomar simplemente unos pinchos, acompañados de una gran variedad de vinos por copa, o sentaros en el comedor para una comida o cena más completa, al gusto del consumidor. Jaleo se ha hecho, por derecho, un hueco en la concurrida zona de vinos de La Coruña, y es que uno siempre está deseando volver.