MIÉRCOLES 16 OCTUBRE 2019
Nos levantamos en Fresno, en el cuarto de la casa de Kevin, que habíamos alquilado a través de AIRBNB, sobre las 6:45. Queríamos ir con tiempo suficiente para llegar a Yosemite y aprovechar el máximo de tiempo en este espectacular Parque Nacional. Por cierto, los americanos pronuncian el nombre tal como «Yosémiti», que nos costó entender las primeras veces.
Desayunamos, cerramos las maletas e iniciamos la ruta, parando sólo para llenar el depósito de gasolina (80$), pues conforme nos acercábamos a Yosemite el precio aumentaba.
El Parque Nacional de Yosemite ocupa un área de más de 3000 m2, incluyendo Sierra Nevada (cuyo pico más alto es de 4000 m). Fue nombrado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1984. Como siempre, nos pidieron el Anual Pass en la entrada, entregándonos a cambio un panfleto y un periódico de novedades.
Yosemite se divide en cuatro partes:
–High Sierra: zona montañosa, esculpida por los glaciares, con numerosas rutas de senderismo,
–Granite Cliffs: una de las mecas de los escaladores gracias al Half Dome y El Capitán,
–Sequoia Grove: bosque de Sequoias, no son tan grandes como las de Sequoia National Park pero al parecer impresionan también.
-Valley: por donde discurre el río Merced, donde hay ciervos, osos y un gran número de fauna y flora, además de unas impresionantes cataratas,
Las recomendaciones de Kevin fueron las siguientes:
1.Glacier Point: este punto se encuentra a 2.195m y desde él hay impresionantes vistas del valle, las cataratas, el Half Dome y otros famosos picos (alguno de más de 3.500m). La flora se compone principalmente de abetos y pinos.
La forma del Half Dome sigue siendo un misterio. Los geólogos no saben todavía explicar cómo este granito se erosionó de esta manera, a medida que fue surgiendo a superficie desde una profundidad de cinco millas bajo tierra. Algunos alegan que es su forma original, y de hecho sólo parece que le falta la mitad si se observa desde el Valle; en las épocas de los hielos los glaciares moldearon sus caras, por ellos aparecen hoy en día tan escarpadas.
2.Yosemite Tunnel View: bajamos al valle que vimos desde Glacier Point para hacer la típica foto del Gran Capitán (1095 metros), Half Dome (1440 metros) y la catarata. Por cierto, una leyenda de los indios de la zona dice que una joven llamada Tis-se-yak y su compañero llegaron al valle desde un remoto lugar, tras días de caminata. La joven llegó al lago y de la sed que sentía lo secó, causando una gran sequía en la zona. Su compañero recriminó este hecho y comenzaron una pelea. Los espíritus acabaron por transformarlos en piedras: uno en el Half Dome y otro en el North Dome, para que estuvieran uno frente al otro en Valle para siempre. Tened cuidado con lo que hacéis durante vuestra estancia en Yosemite…
3.Bridalveil Falls: dejamos el coche en el parking, que está a 5 minutos de las cataratas. Si queréis acercaros hasta ellas para hacer una foto serán alrededor de 30 minutos entre ida y vuelta. Muy bonita, con casi 190 metros de caída, pero hay que tener cuidado con las piedras, que algunas resbalan.
4.Vernal y Nevada Falls: 4 horas de ruta a pie con unos paisajes que dejan sin habla. Dejamos el coche aparcado donde pudimos y cogimos el free shuttle hasta la última parada (Happy Isles, nº 16).
Allí atravesamos un puente y comenzamos la subida, llegando primero a Vernal Falls (con 97 metros de altitud).
Hasta ese punto se camina bien y además hay una fuente de agua para rellenar botellas, pero a partir de ahí comienzan un montón de escalones irregulares de piedra que nos horribles.
Conducen hasta lo alto de las Vernal Falls y, una vez arriba, llanea levemente conduciendo a otro sendero que lleva a un claro del río Merced.
La ruta continúa sin parar de subir, de hecho para mí ésta fue la parte más dura. Se trata de un camino de piedras más o menos complicado, aunque con preciosas vistas (y más ahora que empezaba el Otoño). Pelayo además, como le gustan las cuestas hacia arriba me llevó con la lengua fuera, apenas paramos durante el ascenso.
Finalmente aparecen las Nevada Falls (181 metros), una estampa realmente espectacular. La parte alta es realmente bonita, pues el río Merced conforma una pequeña laguna y además se puede observar cómo ha ido erosionando las piedras, que muestran curiosas formas.
Volvimos por Muir Trail, un camino bonito, fácil y cuesta abajo, que llega prácticamente hasta la fuente de agua. Todo la ruta nos llevó sobre 4h, yendo a buen ritmo (14:30-18:30). Yo tuve algún momento de bajón, sobre todo en la parte de subida, pero me alegro de haber terminado la ruta. Hizo más bien calor cuando empezamos, bajando poco a poco la temperatura hasta estar muy agradable, ideal para caminar.
El Parque cataloga las rutas como «Strenuous» (arduas, extenuantes), con 300 metros de desnivel hasta Vernal Falls y 580 hasta Nevada Falls. Sino tenéis tiempo o no queréis sufrir demasiado podéis caminar sólo hasta las Vernal Falls (aunque repito, el sufrimiento tendrá su merecida recompensa en el otro caso).
Por cierto, John Muir fue un naturalista que vivió en el Parque que tanto amaba y que, además, consiguió que el Presidente Theodore Roosvelt lo visitase a principios del siglo XX. Ambos comenzar a diseñar el plan de protección de la zona, que salvó a Yosemite de la explotación humana.
Una vez de vuelta al coche comimos algo y arrancamos en dirección a San Francisco. Hicimos noche en un pueblo a medio camino llamado Turlock, pues Modesto era la población más grande de la zona, pero nos quedaba un poco lejos. Cogimos el Motel más barato de la zona que, nuevamente, resultó ser de la cadena Motel 6. Pagamos 66$ por un cuarto doble de no fumadores (sin embargo cuando llegamos a la habitación sí olía ligeramente a humo). La habitación era básica, sin nevera ni secador de pelo.
Antes de llegar al hotel pasamos por la famosa cadena californiana de hamburguesas In-n-out, para coger un par de hamburguesas y cenar en el cuarto. Pagamos por una cheesburguer, una doble y dos raciones de patatas 11’54$, una ganga, y además están bastante buenas para ser de una franquicia.
Mientras esperábamos a por la comida estuvimos viendo cómo preparaban los pedidos los trabajadores: las patatas las cortaban allí, o sea, no son congeladas, y nos gustó el proceso.
Una vez en el cuarto cenamos viendo varios capítulos de Jane the Virgin en Netflix y luego a dormir. Hubo algo de ruido de coches durante la noche, pues el motel está muy cerca de la carretera.
KILÓMETROS RECORRIDOS HOY: 370 Km
KILÓMETROS TOTALES: 4120 Km
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