Diario Costa Oeste USA, día 16: Silicon Valley y San Francisco

Google. Palo Alto

MIÉRCOLES 17 OCTUBRE 2019

Nos levantamos sobre las 9 en el Motel 6 de Turlock y acudimos hasta la recepción a buscar café. Una vez que tuvimos las bebidas volvimos al cuarto para desayunar con comida del Walmart. Cuando estuvimos listos pusimos rumbo a San Francisco. 

Motel 6 Turlok

Para no pagar el peaje por entrar a través de los puentes y por hacer alguna visita por el camino, entramos a la ciudad por el sur, desde Silicon Valley

Sede de Google en Palo Alto
Coches eléctricos cargando baterías en la calle

La primera parada que hicimos fue en Palo Alto, con el fin de ver la sede de Google. Aparcamos en la calle y caminamos por la zona, que es bien amplia. Vimos las bicis de colores, el parque con las estatuas de Android, la tienda, etc. Por cierto, compré un par de muñecos de Android que caminan dándoles cuerda, para regalar (8’7$).

Bicicleta de Google
Parque de figuras Android

Parque de figuras Android

También observamos cómo los trabajadores acudían a una plaza a coger comida de varias foodtrucks, gratuitamente. Si no conocéis a nadie que trabaje allí no podréis entrar en los edificios (todos iban identificados con tarjetas) pero sí caminar por los exteriores.

Sede de Google en Palo Alto
Muñecos Android

De ahí fuimos a visitar la Universidad de Standford, que también se encuentra en Palo Alto. Buscamos un sitio para comer barato en Internet y nos salió The Treehouse así que atravesamos el campus y nos dirigimos al local, que estaba dentro de una especie de pequeño centro comercial con numerosos restaurantes. Había justo delante un parking sin barrera ni ningún tipo de control pero aún así echamos en la máquina el suelto que llevábamos (2’25$), que nos dio para 30 minutos.

Plato combinado con gambas en Treehouse
Burrito de Treehouse

El local no era nada del otro mundo pero estaba en pleno meollo de los estudiantes universitarios así que fue una experiencia curiosa, poder observar a los alumnos norteamericanos en su hábitat natural. Pedimos un plato de gambas para Pelayo y un burrito thai para mí, una cerveza y una soda, pagando 25’5$ (lo que no nos pareció ninguna ganga, a saber cómo eran los demás sitios…). 

Universidad de Standford

Las raciones eran abundantes y estaban bien, sin ser nada excelente. El burrito para mi gusto tenía demasiado arroz blanco dentro. Cuando acabamos de comer volvimos al parking y, a pesar de haber tardado más de 30 minutos, no teníamos ningún aviso. Cogimos el coche y nos dimos una vuelta por el campus, que es bien bonito: hay un montón de verde, campos para jugar al fútbol, baloncesto, voleibol, etc.

Universidad de Standford

Nos dirigimos entonces hacia Menlo Park para ver el garaje en donde nació Google, que se encuentra en el número 232 de Santa Margarita Avenue. Allí Sergey Brin y Larry Page alquilaron en 1998 el garaje de una estudiante de Standford, llamada Susan Wojcicki, quien necesitaba ayuda para pagar la hipoteca. Hoy en día Susan es Directora Ejecutiva de Youtube (y considerada por Forbes como una de las 100 mujeres más poderosas del mundo), pero Sergey y Larry son los fundadores de Google (y como podéis suponer dos de las personas más ricas del mundo). El garaje está un poco escondido, no directamente en la calle, como en una especie de patio. Aprovechamos para echar gasolina en una estación de la cadena 76, pagando 73’39€.

Garaje donde nació Google. Menlo Park

Garaje donde nació Google. Menlo Park

Entramos finalmente en San Francisco, pasando por delante del Ayuntamiento y siguiendo por Mission Street hasta llegar a Lombard Street, que es donde teníamos la reserva para tres noches.

Ayuntamiento de San Francisco
Mission Street

Tras mirar muchos moteles y hostales me decidí por Travel Inn, pues era de los pocos que tenía aparcamiento en plena ciudad, buenas críticas y un precio «medianamente razonable», dentro de lo cara que es la ciudad (451$ por las tres noches). El parking de todos modos funciona como en casi todos los moteles: el primero que llega coge plaza hasta que se llene y si se completa pues hay que buscarse la vida.

Travel Inn San Francisco

Travel Inn de San Francisco

El chico de la recepción, que era muy amable, nos dijo que podríamos tener problema para aparcar el fin de semana si llegábamos muy tarde así que lo seguimos a rajatabla. De todos modos todos los días vimos aparcamientos libres (al menos a la hora que llegamos). La habitación era amplia y cómoda, el barrio bueno, así que estuvimos a gusto allí. 

Lombard Street

Dejamos las maletas en la habitación y salimos a dar un paseo por la ciudad. Caminamos desde el hotel, por la Calle Lombard, hasta el final de la misma con el fin de ver las famosas curvas. Había una cola enorme de coches bajando y un montón de gente haciendo fotos desde todos los ángulos, no os las pasaréis de largo. Este tramo de ocho cerradas curvas ostenta el título de la calle con más curvas de USA, que ayudan a salvar una pendiente de 27º.

Famosas curvas de Lombard Street

Caminamos hasta Ghirardelli, donde comprobamos que entregan una chocolatina a cada persona que entra. Como entramos en varias de sus tiendas, todas muy céntricas, nos agenciamos un puñado de ellas entre los dos. Hicimos un descanso para tomar un par de cervezas en un local muy chulo, al lado de Ghirardelli, llamado SF Brewery, pagando unos 20$ por dos pintas. 

Ghirardelli

Por cierto, al lado de la plaza de Ghirardelli está el punto en el que el antiguo tranvía/cable car da la vuelta. Según supimos los tranvías empezaron a circular por 1873 y estuvieron a punto de desaparecer en 1947. La población consiguió mantenerlos e incluso hoy en día están protegidos como Lugar histórico. Hay tres líneas y 40 tranvías con unas sesenta paradas por la ciudad, de uso fundamentalmente turísitico. La visita al Cable Car Museum, en 1201 Mason Street (Chinatown), es gratuita, de 10-17 horas todos los días, por si os interesa.

Cable Car

Paseamos después por la preciosa bahía de San Francisco, que continúa por el famoso Fishermans Wharf, lleno de tiendas y locales de todo tipo. Fue un antiguo barrio de pescadores, totalmente restaurado y lugar habitual de eventos. Hay famosos muelles a lo largo de Fishermans Wharf:

Hyde Street Pier: con varios barcos históricos, que se ven en la foto

Hyde Street Pier San Francisco

Pier 45: donde está el barco SS Jeremiah O’Brien, utilizado durante el desembarco de Normandía, y el submarino USS Pampanito

Museo Mecánico: al parecer muy divertido y gratuito

Fishermans Wharf

Pier 39: con numerosos restaurantes, galerías, artistas callejeros, etc. Allí también se encuentra una colonia de leones marinos de la que hablaré más abajo.

Fishermans Wharf

Decidimos cenar algo y como yo tenía ganas de probar la famosa Clam chowder pues entramos en Boudin, en donde se inventó el pan Sourdough o de masa fermentada (a partir de una receta francesa). Había opción de pedirla para llevar pero a Pelayo le gustó el local y prefirió sentarse en el restaurante que hay en la segunda planta (en la primera está la tienda al público). La Clam chowder es una sopa de almejas con patata y nata que tradicionalmente se sirve dentro de un pan de masa ácida.

Boudin
Boudin
Personal trabajando a la vista de los transeúntes

Resulta que en arriba había un pequeño museo que explica la historia de la marca además de ensalzar otras preparaciones originarias de San Francisco: Martini, Joe’s Special (plato con espinacas, huevo, carne, etc), Chop suei, Mai tai, la Galleta de la suerte, Dungeness crab, Crab cioppino, popsicle o helado de polo, etc.

Museo Boudin

Museo Boudin

Cuando entramos en el restaurante resultó ser un local precioso, en donde rápidamente nos asignaron una mesa. Pedimos los siguientes platos:

-Pelayo se pegó un buen homenaje a base de un Dungeness Crab (pena que yo sea alérgica…). Le trajeron un babero muy simpático para que no se ensuciase la ropa.

Restaurante Boudin. San Francisco

-Clam chowder para mí: muy sabrosa, imposible terminarse el pan en el que viene servida

Restaurante Boudin. San Francisco

-Beignets de postre

Restaurante Boudin. San Francisco

Todo estaba riquísimo y la atención fue excelente, así como el local cuyo ambiente es mágico. Para beber pedimos una cerveza y una copa de Riesling, pagando por todo 92’3$+10$ de propina=102’3$, lo cual ni tan mal para ser SF y en pleno centro.

Cena en Boudin

Por cierto, llamó mi atención una foto que había en el local del famoso terremoto de 1906 en la que se puede apreciar la devastación. Al parecer fue de una magnitud de 7’9 grados y se produjo tal incendio que la mitad de la ciudad se quedó sin hogar (aparte del gran número de fallecidos)

Foto del terremoto del 18 de Abril de 1906

Caminamos después hasta el famoso Pier 39, a donde acuden los leones marinos a dormir y pasar el rato (se escuchan sus ruidos desde mucha distancia, son fáciles de encontrar). Al parecer, después del terremoto de Loma Prieta de 1989, empezaron a llegar a causa de los bancos de arenques y por la protección frente a depredadores que les proporcionaba el puerto.

Pier 39

Al cabo de los meses ya había 300 ejemplares y con el tiempo se empezaron a quedar; el número máximo, 1701 ejemplares, se registró en Noviembre 2009. Los leones marinos migran a lo largo del año entre Vancouver (Canadá) y Baja California (Méjico). Durante los meses de verano viajan hacia el sur para reproducirse y dar a luz a sus crías, pero algunos siempre prefieren quedarse en el Pier 39 durante todo el año. Los machos pueden llegar a pesar 390 kg y medir 2’1 metros de largo, mientras las hembras andan por los 110 kg y 1’8 de largo. Se diferencian bien, pues los machos que sobrepasan los 4-5 años de edad desarrollan una especie de cresta o bulto en la cabeza. Las crías suelen nacer en el sur de California durante el mes de Junio.

Leones marinos en el Pier 39

Volvimos caminando al hostal, lo que nos llevó sobre 40 minutos, y a dormir. En total hicimos sobre unos 8 km a pie.

KILÓMETROS RECORRIDOS HOY: 250 Km

KILÓMETROS TOTALES: 4370 Km

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